La crianza de los hijos en Suecia ha sido reconocida por sus enfoques progresistas que dan como resultado niños más felices y más seguros de sí mismos. El modelo se basa en 4 pilares fundamentales que incluyen
-La importancia de la vida al aire libre
-El contacto con la naturaleza
-La igualdad e independencia de género
-El tiempo compartido en familia.
La educación sueca pone énfasis en la importancia del contacto regular con el medio ambiente, animando a los niños a jugar al aire libre en todas las estaciones, lo que promueve un estilo de vida saludable y una actitud positiva hacia la naturaleza.
La reconocida especialista en maternidad y paternidad, Linda Akeson McGurk, destaca la importancia del contacto con la naturaleza en la crianza de los hijos, basándose en el concepto escandinavo de friluftsliv o vida al aire libre.
Los padres suecos valoran los deportes al aire libre, la igualdad y autonomía de género y el tiempo en familia. Pasar tiempo al aire libre promueve la salud física y mental, el desarrollo cognitivo y la resiliencia.
La igualdad de género y la autonomía promueven la autoestima, la responsabilidad y la independencia, al tiempo que desafían los estereotipos de género.
El tiempo en familia construye familias más fuertes y conectadas y promueve el desarrollo emocional y la felicidad de los niños.
Los padres suecos dan prioridad a pasar tiempo de calidad juntos, participando en actividades como cenas familiares periódicas, juegos de mesa y salidas al aire libre.
Se promueve el equilibrio entre la vida personal y laboral, con horarios de trabajo flexibles y permisos parentales generosos.